Una llave simple para quiero diezmar Unveiled

Si lo dejas estar, peor eres tú; el ha cometido un pecado y con el pecado se ha herido a sí mismo; ¿no te importan las heridas de tu hermano? Le ves perecer o que ha perecido, ¿y te encoges de hombros? Peor eres tú callando que el faltando (Santo AGUSTÍN, Sermón 82).

No puede llamarse feliz quien no tiene lo que gobernante, sea lo que fuere; ni el que tiene lo que gobernante si es pernicioso; ni el que no ama lo que tiene, inclusive cuando sea lo mejor (Santo AGUSTÍN, Sobre las costumbres de la Iglesia, 1).

Es un tipo de donación en la cual sólo se extrae de forma selectiva uno o varios de los componentes de la mortandad, devolviendo el resto al donante.

Tú, luego, que deseas ser útil a las almas del prójimo, primero acude a Todopoderoso de todo corazón y pídele simplemente esto: que se digne infundir en ti aquella caridad que es el compendio de todas las virtudes, aunque que ella te hará alcanzar lo que deseas (Santo VICENTE FERRER, Trat. de la vida espiritual, 13).

Dios usa el esfuerzo, el tiempo, y las ofrendas de los creyentes para traer fruto espiritual en su tiempo. No veamos las ofrendas como fortuna perdido, sino como hacienda invertido en una causa con implicaciones eternas.

Es ciertamente mas fácil enfadarse que tener paciencia, amenazar a un niño más que persuadirlo; diría incluso que es más cómodo para nuestra impaciencia y nuestro orgullo castigar a los que nos resisten que corregirlos, soportándolos con firmeza y bondad [..

Nuestro corazón se dilata. Del mismo modo que el calor dilata los cuerpos, así también la caridad tiene un poder dilatador, pues se alcahuetería de una virtud cálida y fogoso. Esta caridad es la que abría la boca de Pablo y dilataba su corazón [...]. Ausencia encontraríamos más dilatado que el corazón de Pablo, el cual, como un enamorado, estrechaba a todos los creyentes con el resistente achuchón de su bienquerencia, sin que por ello se dividiera o debilitara ese apego, sino que se mantenía íntegro en cada singular de ellos.

Tales almas son siempre aficionadas a atinar mucho más que no a admitir, y aún con el mismo Criador les acaece esto. Y esta afición santa merece nombre de inclinación, que esotras aficiones bajas tiénenle usurpado el nombre (SANTA TERESA, Camino de perfección, 6, 7).

El apego puntada por sí solo, satisface por sí solo y por causa de sí. Su mérito y su premio se identifican con él mismo. El apego no requiere otro motivo fuera de él mismo, ni siquiera ningún provecho; su fruto consiste en su misma práctica.

El diezmo es una modo de poner a Altísimo en primer punto en nuestras vidas. Cuando priorizamos nuestras finanzas y entregamos nuestro diezmo antiguamente que cualquier otra cosa, estamos demostrando nuestra dependencia de Altísimo y nuestra confianza en que Él suplirá todas nuestras micción.

Esta fue la época de la acumulación de tributos que al principio hemos descrito; aquella en que el hecho de acampar los soldados de los Tercios españoles en un pueblo significaba para éste algo comparable al paso de la peste. Fueron los siglos de la progreso histórica hacia nuevos conceptos filosóficos y diferentes planteamientos de la vida social durante los cuales se diluirían progresivamente, hasta perderse por completo las estructuras feudales tal como estuvieron planteadas durante siglos, hasta consolidarse la diezmar burguesía con fuerza Vivo y personalidad propia.

Así pues, todo hombre que vive entre los hombres busque a Aquel a quien ama, de modo que no abandone a aquel con quien camina; y preste a este su auxilio de tal guisa que bajo ningún motivo se separe de Aquel a quien se dirige (Santo GREGORIO MAGNO, Hom. 38 sobre los Evang.).

Coalición por el Evangelio ayuda a la iglesia a conocer la Palabra de Altísimo con la mente, amar a Todopoderoso con el corazón, y proclamar la Chispa y la verdad del evangelio de Jesús.

Cuando nos veamos precisados a reprender a otros, pensemos primero si alguna ocasión hemos cometido aquella desatiendo que vamos a reprender; y si no la hemos cometido, pensemos que somos hombres y que hemos podido cometerla.

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